En una cultura donde se ha sobrevalorado la entrega amorosa ilimitada, la vida en pareja se ha convertido en la principal forma de autorrealización. Un sentimentalismo exagerado ha hecho que se ignore el sacrificio personal que implica tal abnegación. Sin embargo, el amor no lo justifica todo. Existe otra forma de entender el amor: amar sin destruirnos a nosotros mismos y huir de la idealización absolutista; se puede amar sin ansiedad y sin negociar los principios vitales que nos determinan. Un amor maduro es el que integra el amor por el otro con el amor propio sin conflicto de intereses. ¿Quién dijo que para amar había que anularse y dejar de lado los proyectos de vida? Para amar no debes renunciar a ti mismo, ésa es la máxima.
Entradas populares
-
Connie es una brillante joven aspirante a profesora de historia de Estados Unidos en la dura y competitiva Universidad de Harvard. El vera...
-
Muchas personas consideran cubiertas sus necesidades de consulta o apoyo lingüístico con un buen diccionario de la lengua o, más aún, co...
-
Los mejores platillos son aquellos que preparamos en casa; pensando en ello COCINA DOÑA LUPITA nos presenta una variedad de rectas en las...
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Categorías
Anatomía
AudioLibro
Autoayuda
Belleza
Biología
Biomecánica Clinica
Bioquimica
Cardiología
Ciencia Ficción
Cirugía
Cocina
Cuentos
Dermatología
Drama
Educativos
Embriología
Empresarial
Endocrinología
Enfermería
Epicas
Epidemiologia
Fantasía
Farmacología
Fisiología
Fisioterapia
Fitness
Gastroenterologia
Genética
Geología
Ginecología
Hematologia
Histología
Importante
Ing. Petroquímica
Libros de Medicina
Liderazgo
Literatura
Magia
Medicina Natural
Mísitico
Neumología
Neurología
Novelas
Nutrición
Parasitología y Microbiología
Pediatría
Psicología
Psiquiatría
Romance
Seducción
Sexualidad
Tragos y Bebidas
Con la tecnología de Blogger.
No hay comentarios:
Publicar un comentario